¿CÓMO ELEGIR EL COLCHÓN ADECUADO?

Una noche de sueño reparador, sin despertares, malas posturas o dolores, es fundamental para iniciar un nuevo día. Como fisioterapeuta os puede decir que hay 3 cosas a tener en cuenta: la postura, la almohada, (lo podéis leer pinchando en los dos post anteriores)  y el colchón.

 

Como sabéis en el mercado hay todo tipo de materiales: muelles, látex natural o sintético, viscoelástico, espuma, antiescaras,  hinchables, hasta de agua…

 

Consejos de Fisioterapia

• Debe adaptarse a nuestras características físicas (edad, altura, peso, sensibilidad de la piel…), por lo tanto, lo más importante como ya os comenté con el tema de las almohadas, es probarlo en la tienda, sí, sí, tumbarse allí un rato, mínimo 10 o 15 minutos, girar, acomodarse, igual que en nuestra propia cama. Y si es cama de matrimonio, pues los dos a la vez.

• Ser firme:
• No excesivamente duro porque ejercerá demasiada presión en los puntos de apoyo.
• Tampoco blando, porque nos envolverá demasiado, limitando el movimiento. 
• Lo ideal es que mantenga las curvaturas naturales de nuestra columna. 
• Hay estudios que recomiendan elegir colchones de firmeza media si nuestro índice de masa corporal (IMC) está por encima de 27, y de firmeza media baja, si el IMC está por debajo de 23.

• Para camas de matrimonio, se recomienda mínimo un ancho de 150 cm para que las dos personas cuenten con espacio suficiente para descansar correctamente.

• Con problemas de circulación, el colchón debería ser blando para aliviar la presión de contacto que puede bloquear el flujo sanguíneo.

• Aquellas personas que deban mantener la misma postura durante mucho rato, deben tener un colchón blando, con la recomendación de realizarle cambios posturales cada cierto tiempo para garantizar una repartición homogénea de la presión.

• Un colchón articulado también puede ser una gran solución en estos casos. Ya que permite ajustar los ángulos de la superficie, favoreciendo la circulación. Combate el dolor por artritis, asma y otros problemas respiratorios, reflujo, hinchazón de pies o piernas…

Consejos para su buena conservación

• Darle la vuelta periódicamente. Al menos una vez cada 3 meses. Gírelo de arriba abajo y de derecha a izquierda para que el desgaste sea homogéneo.

• Ventile cada mañana la habitación durante 10 minutos.

• El grado de humedad ideal del dormitorio está entorno al 60 % y la temperatura debería oscilar entre 18 y 20 grados.

 Se debería cambiar de colchón si…

• Tiene más de 10 años, ya que habrá perdido la firmeza, la suciedad y los ácaros se habrán acumulado con el sudor y las enfermedades.

• Duerme acompañado y tiende a caer hacia el centro sin quererlo.

• Tiene abultamientos o deformidades, está inclinado o hace ruido.

• Se levanta con dolor de espalda.

En un próximo post os explicaré como levantase correctamente de la cama.


Espero os haya sido de ayuda y recordar que una buena cama es fundamental para el buen descanso y prevenir molestias innecesarias, al fin y al cabo, pasamos en ella un tercio de nuestra vida.

Fátima